7.1 PROCESADORES DE DINÁMICA
Por dinámica se entiende lo relativo a los niveles
de una señal
de audio. Si se tiene
una señal con pasajes que suenan muy altos, pasajes
que suenan bajos
y pasajes normales, se dirá que la señal
tiene una dinámica
muy variada.
El margen
dinámico de una señal sonora coincide con el máximo
nivel en dB NPS (decibelios de nivel de presión sonora)
de la señal. Si el nivel máximo
de la señal son 60dB NPS, se dirá que su margen
dinámico es de 60dB. Esto es así porque en niveles NPS (niveles de presión sonora),
el nivel más bajo es 0 dB NPS; así NPS máximo
menos NPS mínimo (0 dB) es igual a NPS máximo. En cambio, cuando
se habla de un dispositivo electrónico, como un grabador o una mesa
de mezclas, se hablará de margen dinámico útil o simplemente margen dinámico que corresponderá al nivel máximo
sin saturación menos el nivel
de ruido. En estos casos,
los niveles de señal se refieren a 0 dB como nivel
máximo, por encima
del cual el sistema se satura, siendo el nivel de ruido
un valor negativo,
por ejemplo -80
dB.
El oído humano acepta
un margen dinámico
de 120 dB NPS sin sufrir daños.
Sin embargo, los mejores sistemas
de grabación digital
aceptan un margen
dinámico de 100 dB. La radio FM puede
manejar márgenes dinámicos de 65 dB y un vídeo profesional 55 dB. Por este motivo, para trabajar
y grabar señales
reales con márgenes
dinámicos superiores, son necesarios los procesadores de dinámica.
Dinámica
de los 10 primeros segundos
de un tema musical.
Un procesador de dinámica es un dispositivo electrónico que modifica, a voluntad del usuario, la dinámica de la señal
que atraviesa por
él.
7.2.a.- Compresor.
Un compresor es un aparato
que reduce la dinámica de la señal
de entrada. Así, a la salida, los niveles instantáneos de la señal
serán menores de lo que eran a la entrada,
pero no todos en la misma medida,
sino que los niveles más altos sufrirán
una atenuación mayor que los niveles
bajos. Por eso se dice que trabaja
sobre la dinámica.
Dinámica
de la señal de entrada
(izda.) y salida
(dcha.) en un compresor.
En la figura superior
se muestra la dinámica de una señal
(niveles máximos, no forma de onda) antes y después de pasar por un compresor con una relación
de compresión 2:1 y umbral en 0 dB. Por debajo de 0 dB la forma de la dinámica no ha sido alterada.
La relación
de compresión (ratio),
establece la proporción de cambio entre
los niveles de entrada y los
de salida. La relación de compresión es variable, dependiendo del compresor, entre 1:1
(uno a uno,
no hay compresión) a 20:1 (veinte
a uno, muy fuerte compresión). Si el ratio
está fijado en 2:1, significa que por cada
dos dB que aumente el nivel de la señal,
a la salida sólo aumentará uno. Estos son necesarios para ajustar el margen dinámico
de la señal al margen
dinámico del canal;
así, señales con márgenes dinámicos mayores que el de una cinta,
han podido ser grabados y producidos. Una fuerte compresión, por encima de 4:1 crea
un sonido artificial y monótono.
El umbral
de compresión (threshold) ajusta el nivel
en dB por encima del cual se aplicará compresión. El tiempo de ataque (attack)
es el tiempo que pasa hasta que el compresor reacciona y empieza
a comprimir. El rango del
tiempo de ataque
suele estar entre
0.25 y 10 ms. según
el uso que se le de puede
realzar o empobrecer el sonido. El tiempo de relajación (release)
ajusta el tiempo
que tardará el compresor en dejar de comprimir la señal; este valor puede variar de 50ms. a varios segundos. También suelen incorporar un control de codo (knee) que selecciona cómo es la transición entre
la zona procesada y la no procesada; esta puede ser suave (soft)
o exacta (hard).
Gráfica
de las relaciones entrada - salida
con distintas compresiones.
La gráfica
superior sirve para entender cómo trabaja un compresor. Para todas las relaciones de compresión de la gráfica,
el umbral se ha situado
en -10 dB. Conociendo el nivel de entrada y siguiendo las líneas, se obtiene el nivel de salida. Si por ejemplo
la compresión está fijada en 2:1 (línea
verde) y el nivel de entrada es de +10dB,
la salida, siguiendo
la gráfica será
de 0 dB. Por debajo
del umbral, no hay compresión (1:1) y la señal sale con el mismo nivel
con el que entra. La gráfica corresponde al modo en codo hard,
si fuese soft, en lugar
de un ángulo en el umbral, habría
una curva.
No existe una norma de cómo situar los controles par un óptimo
resultado, por eso lo mejor es hacer múltiples pruebas para ir determinando cómo quedan mejor ajustados los parámetros. Por ejemplo: un tiempo de relajación corto combinado con una baja relación de compresión hace parecer a la señal
más sonora de lo que es. En el capítulo 12,
dedicado a la dinámica, encontrarás tablas de compresión para diversos instrumentos.
Un compresor es útil en muchas ocasiones. Por ejemplo para
mantener constante el nivel cuando un artista
no mantiene una distancia constante con el micrófono.
También permiten manejar señales
con grandes márgenes
dinámicos o niveles
de presión muy altos
como trompetas, bajos,
guitarras o percusiones. En mensajes comerciales su usa mucho la compresión para incrementar al máximo posible
el nivel de salida y llamar la atención del publico.
La última tendencia en procesado de dinámica consiste
en procesar la señal por bandas. Gracias a la potencia
que ofrecen los procesadores DSP, se puede
separar la señal digitalizada en diferentes bandas
y aplicar distintos grados de compresión, expansión u otro tipo de procesado
a cada una de ellas.
Encontrarás más información sobre este tipo de compresión en el apartado
12.4-Compresores multibanda.
7.2.b.- Limitadores.
Un limitador
es un compresor cuyo nivel de salida
máximo está fijado
en un punto. Por encima de este nivel máximo,
la salida es independiente del nivel de entrada. Se puede deducir que
los limitadores aplican
una compresión total
por encima del umbral por
lo que la relación de compresión está
fijada y no es variable. En nivel de la señal
de salida de un
limitador nunca pasará
de un valor dado.
Lo que sí se puede variar
es el umbral de limitación por encima del cual actúa
el limitador. Los tiempos
de ataque y relajación, si no se pueden variar,
suelen venir fijados
en valores cortos,
especialmente el ataque.
Los limitadores se usan para
prevenir la saturación de algún canal
o grabador; usados
junto a un compresor pueden
dotar de mayor potencia o volumen aparente
a una señal.
7.2.c.- Expansores.
Los expansores, igual que los compresores trabajan
sobre la dinámica
de las señales, pero en el sentido contrario. Lo que hace es aumentar
las diferencias de nivel cuando estos niveles
caen por debajo
del umbral, expandiendo así la dinámica
de la señal. Cuando los niveles de la señal
están por encima
del umbral, el nivel de salida es igual al de entrada.
Gráfica
de las relaciones entrada - salida con
distintas relaciones de expansión.
En la gráfica superior se muestran distintas curvas de expansión en función de la relación seleccionada. En este caso el umbral se ha fijado
en +5 dB. Con una relación de expansión 1 : 2 (uno a dos) marcada
en verde, una señal que un instante
tenga un nivel
de -5 dB y en otro 0 dB, a la salida
del compresor tendrá
niveles de -15 dB y -5 dB respectivamente, con lo que la diferencia de nivel pasa
de 5 dB a 10 dB.
Dinámica de la señal
de entrada (izda.)
y salida (dcha.)
en un expansor.
La figura
de arriba muestra
la dinámica antes (izda.) y después (dcha.)
de pasar por un
expansor, con el umbral fijado
en +3 dB. Los parámetros de un expansor
son: relación de expansión, umbral,
tiempo de ataque
y relajación. Igual que el compresor, el expansor afecta a la dinámica cuando
esta cae por
debajo de un cierto valor
fijado por el umbral. Si el ratio se fija en 1:2 (uno a dos), por cada dB de incremento de la señal
de entrada, la señal de salida tendrá un incremento de 2 dB.
7.2.d.- Puertas de ruido.
En un sistema de sonido, existen
muchas fuentes, muchas
de las cuales son fuentes
de ruido, como micrófonos abiertos
y reproductores de cinta. El cometido las puertas de ruido es reducir
el mismo. La forma de reducirlo es atenuarlo en los momentos
donde más se puede notar,
que es cuando se produce
un silencio.
Las puertas
de ruido derivan
de los expansores cuando la relación de expansión tiende
a valores muy altos. De esta manera,
cuando la señal
cae por debajo
del umbral, la salida correspondiente tiene niveles próximos
a cero.
Los controles de una puerta
de ruido pueden ser varios.
Siempre se encuentra
el control de umbral, que fija el nivel, por debajo del cual, se entiende que lo que queda es ruido.
También se pueden encontrar
controles del tiempo de ataque
y tiempo de relajación, aunque en modelos sencillos o aplicaciones de puerta de ruido incorporadas a compresores, estos tiempos vienen
ajustados.
El tiempo de ataque es el tiempo que tarda la puerta en comenzar a abrirse y dejar pasar señal. Un tiempo muy corto puede crear distorsión si se abre en mitad de un ciclo de una señal de baja
frecuencia. De manera
inversa, el tiempo
de relajación es el tiempo
que tarda la puerta
en cerrarse totalmente y no dejar pasar nada de señal.
Durante este tiempo,
la señal se va atenuando progresivamente. Los tiempos
de relajación son mucho mayores
que los de ataque.
El tiempo
de mantenimiento (hold)
controla el tiempo
que ha de pasar desde que la señal cae por debajo
del umbral hasta
que la puerta
comienza a cerrarse. Su cometido es evitar falsos cierres de la puerta
cuando la señal,
por un instante cae por debajo
del umbral.
Gráfica
de los tiempos de una puerta de ruido.
Ta = Tiempo de ataque, Tm = Tiempo
de mantenimiento, Tr = Tiempo
de relajación. La señal resultante está dibujada en color mostaza
y la parte de la dinámica original
que desaparece en verde brillante. Una vez que
el nivel de la señal
supera el umbral,
fijado en - 30dB, la puerta empieza
a abrirse, en este caso más rápidamente que el aumento
de la señal. Cuando se alcanza el umbral otra vez, la puerta no comienza a actuar tras transcurrir el tiempo de mantenimiento. Después,
durante el tiempo
de relajación la puerta se va cerrando atenuando cada vez más la señal.
Gracias al tiempo de mantenimiento, en el punto "b", donde la señal
cae por debajo
del umbral, la puerta no comienza a cerrarse.
En el ejemplo anterior, la puerta de ruido está ajustada con el umbral
en -21 dB, tiempo de ataque de 1 ms y de relajación de 100 ms. El ruido se puede escuchar mientras
la puerta está abierta,
porque no lo elimina el ruido, sino que no lo deja pasar cuando
se hace más patente, en los silencios. Las puertas de ruido sencillas trabajan cortando la salida de señal cuando el nivel
cae por debajo
de umbral. Otras
puertas más sofisticadas, sólo lo atenúan, de este modo
cuando la puerta
se abra, la transición será
menos brusca.
7.2.e.- De-esser.
Consiste en un compresor
con un filtro que selecciona las frecuencias relativas
a los sonidos con la consonante S. En lugar
de actuar en función del nivel de la señal,
actúan cuando detectan estas frecuencias. Esta utilidad puede estar incorporada en los compresores. Esta función
permite atajar los sonido sibilantes sin afectar al resto de la señal.
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